¿Qué es un Sindicato y Para Qué Sirve?--Segunda Parte

Segunda Parte


En la primera entrega de la secuencia de artículos dedicados a explicar la razón de ser y funcionamiento de estas organizaciones de los trabajadores, en la Gaceta N° 1 se inició confrontando las ideas que nos han inculcado por años desvirtuándolas, haciendo de ellas todo lo contrario de lo que realmente significan. En esta entrega haremos un recuento sobre la causa objetiva de su existencia.
La clase obrera colombiana surge a inicios del Siglo XX ligada a la lucha contra el dominio del capital extranjero o imperialismo, por las reivindicaciones democráticas y socialistas, lo que permitió darle una fuerza extraordinaria al movimiento obrero y al sindical en esa época; de allí que este último haya surgido en las diferentes ramas de la producción como la minería, los textiles, los transportes, las plantaciones, las comunicaciones y las explotaciones extranjeras.
Contrario a la mentira de los dueños del capital que niegan la división de la sociedad en clases sociales, en esta existen unas clases poseedoras de los medios que sirven para producir mercancías o medios de producción (fábricas, tierras, maquinarias o herramientas) que históricamente se les ha llamado burgueses y terratenientes; y otras clases que no poseen tales medios, pero que con su trabajo producen la riqueza de la sociedad, son los obreros -de todas las ramas- y los campesinos. Al negar la división de la sociedad en clases, donde unas viven de explotar el trabajo de otras, se oculta la naturaleza u origen y por tanto la NECESIDAD OBJETIVA de crear organizaciones que luchen contra los intereses de los explotadores en beneficio de los intereses de la mayoría trabajadora, es decir, SINDICATOS, organizaciones de resistencia contra el capital.
Es necesario no pasar por alto el hecho de que dichas organizaciones fueron impuestas por los trabajadores, luego de ejercer su derecho a organizarse el Estado se ve en la obligación de “ratificarlo”, sobre todo por la necesidad de amarrarlo de alguna manera y nada mejor que bajo sus leyes represivas.
Esto muestra que los trabajadores han luchado y ejercido sus derechos y luego el Estado se los ha “otorgado”. No se les dio primero el permiso y luego se lo tomaron, que es la gran mentira que amarra al movimiento sindical.
Los trabajadores al sentir vulnerados sus derechos se ven forzados a organizarse ya que solos no pueden defenderlos, se necesita de la unidad para lograr los objetivos y de la fuerza organizada para mantenerlos; la lucha sindical por mejorar las condiciones de vida: aumento de salario, vacaciones, permisos, beneficios, etc., cuestiones que no solo benefician al obrero que labora en la empresa, sino a toda su familia. De allí que sea celosamente infundido por los capitalistas el cuento que somos “una misma familia” y por lo tanto hay que sacrificarse para mantenerla, pero no dicen nada al respecto cuando despiden a cientos de obreros o quitan -cada vez que pueden hacerlo- los derechos que ya tienen.
En conclusión, los sindicatos nacen por la necesidad de resistir a la explotación asalariada, cuando la burguesía y el proletariado se convirtieron en las clases principales del nuevo sistema de producción capitalista

Comentarios

  1. Excelente oportunidad para saludarlos y felicitaciones por este artículo. Pero sería bueno, que se mostrara la organización de los trabajadores de las bananeras en ciénaga (Magdalena), y cómo fue lo ocurrido entre el 5 y 6 de diciembre de 1928. Gracias.

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