¡POR LA PREPARACIÓN DEL PARO GENERAL INDEFINIDO! ¡ADELANTE!

 

 La sociedad colombiana es capitalista y el Estado está al servicio de las clases dominantes quienes a su vez son socias y salvaguardan los intereses de grandes corporaciones y entidades que buscan el beneficio económico por medio de la explotación de la fuerza de trabajo (reduciendo salarios y condiciones laborales, aumentando las jornadas, el ritmo o las funciones en el trabajo) y destruyendo la naturaleza.  Ante las crisis cíclicas de este modo de producción toman medidas en detrimento del pueblo trabajador: aumentando los impuestos, desmejorando las condiciones de vida del pueblo, y atentando contra sus organizaciones, porque para ellos, representan una amenaza, por lo cual financian grupos paramilitares, aumentan el pie de fuerza y destinan grandes cantidades de dinero en mantener instituciones represivas como la policía y el ejército.

Por su lado, la respuesta del pueblo no se ha hecho esperar y desde hace un tiempo para acá viene reactivando su lucha, tal es el caso de:

 

Los indígenas con la Minga que estuvo en Bogotá con el objetivo de poder presentar al cabecilla de este gobierno mafioso y paramilitar de Iván Duque justos reclamos ante los acuerdos incumplidos con las distintas comunidades indígenas, por recuperar sus territorios ancestrales y por todos los dirigentes del pueblo asesinados y las masacres que han aumentado en el país bajo su gobierno, siendo razones más que suficientes para esta digna gesta. Teniendo en cuenta esta importante lucha y sus objetivos es de resaltar el recibimiento que tuvo la minga en Cali y las distintas regiones del país por parte de distintas organizaciones sindicales y sociales, siendo una muestra de la semilla de unidad que está germinando, de la necesidad de juntar todas las luchas del pueblo en una sola y avanzar hacia un Paro Nacional Indefinido, el medio de lucha más idóneo para conquistar nuevos y viejos derechos y libertades.

 

Los campesinos luchando por tener una tierra propia para cultivar y en algunos casos por vender sus productos, saliendo a los peajes y a las esquinas de los barrios para no dejarse consumir por las deudas de los bancos y la falta de ayuda estatal, también comienzan a manifestarse y hacen plantones frente a las instituciones del Estado para visibilizar sus demandas, entre ellas junto a los indígenas y ambientalistas por la defensa de paramos como el de Santurban y el no daño a los recursos naturales.

 

Los estudiantes en lucha por la matrícula cero con tomas, huelga de hambre y movilizaciones lográndola en las universidades oficiales y su reducción en algunas privadas, siendo representativa su participación en las asambleas populares, donde junto a obreros en activo y desempleados por localidades comienzan a reunirse para discutir la continuación en la lucha por las reivindicaciones de los pliegos, contra el terrorismo de Estado manifiesto en la represión oficial desenmascarada desde el 21 N del 2019 con su noche de terror y cuya línea de actuación se vio al desnudo en las redes sociales y noticieros el pasado 9, 10 y 11 de septiembre al atacar a tiros a la población desarmada, pero decidida.

 

Los obreros luchan por el empleo, el salario, contra el decreto 1174, contra la reforma laboral, por el pago de meses atrasados como en el hospital del Choco, a liquidación de la empresa SAC estructuras metálicas para que se les pague sus salarios y prestaciones sociales, en la huelga de los trabajadores de El Cerrejón que exigen unas mejores condiciones de vida con su pliego de peticiones y sobre todo contra el turno de la muerte, todos por condiciones dignas de trabajo, contra la abierta contraofensiva de los empresarios amparados en la reactivación económica donde a diestra y siniestra han despedido y tienen bajo la mira las organizaciones sindicales como ha pasado con FECODE contra la cual Álvaro Uribe jefe del partido derechista plantea acabar con un supuesto monopolio de los trabajadores organizados, mediante un referendo que en el fondo pretende privatizar la educación oficial.

La lucha de indígenas, campesinos, obreros, estudiantes, pobladores, desempleados y en general del pueblo colombiano, tiene en común un enemigo, el capitalismo imperialista, sistema socioeconómico culpable directo de su situación, que se mantiene y funciona bebiendo la sangre del pueblo. Por esto, es una necesidad de carácter vital la UNIDAD de todo el pueblo, para reclamar, como una sola FUERZA y con una sola PLATAFORMA DE LUCHA todas las necesidades más profundas, tales como el derecho a la salud, a la educación, a una vivienda digna, acceso a los servicios públicos, al trabajo, bienestar social entre otros.

Y precisamente lo que teme el Estado y su forma de gobierno, es la unión del pueblo y la concentración de su fuerza, por eso siempre intentará y procurará dividirlo. Para el caso del movimiento sindical, se presenta a través de una política tendiente a conciliar para favorecer a los empresarios, actuando como sus fieles lacayos y defensores.

Por lo tanto, es deber de los sindicatos y por ende de los sindicalistas el retomar las antiguas banderas del sindicalismo de clase, un sindicalismo revolucionario que sirva exclusivamente a los intereses de la clase obrera, del pueblo trabajador y en contra de los patrones explotadores. Un sindicalismo que no se deje comprar por el gobierno ni por los distintos candidatos políticos que los usan solamente para obtener apoyo económico y votos, siendo imprescindible reorganizarlo a través de una Central Sindical Revolucionaria.

Las actividades organizadas en torno a la conmemoración del 21 de noviembre (21N) que rememoran lo acontecido hace un año donde el pueblo se movilizó contra el llamado Paquetazo de Duque y sus copartidarios, evidenciaron la necesidad de UNIRSE PARA LUCHAR en torno a las reivindicaciones del pueblo y no en torno a los planes limitados de un sector empotrado y burocratizado en las organizaciones sociales y políticas como lo han sido las camarillas dirigentes de las centrales sindicales, conciliadoras y apagafuegos; por tal motivo es tarea del sindicalismo revolucionario promover y participar en las manifestaciones y tareas preparatorias del Paro General Indefinido.

 

¡UN SOLO PUEBLO, UNA SOLA LUCHA!

¡ORGANIZAR ASAMBLEAS POPULARES!

¡INCENTIVAR LAS LUCHAS OBRERAS!